Salvador Pardo

Me gusta enredar mis manos en el barro. Hago piezas con arcillas de diferentes texturas y colores, porque me emociona la sensación que me produce el tacto de los objetos que me agrada tener entre mis manos.
En mi taller construyo instrumentos artesanales de percusión para la música que me hace viajar, esculturas y cosas útiles para usar en los días que habitamos.
He aprendido muchas cosas de otros ceramistas en varios cursos y encuentros, pero sobre todo de mi madre que me ha transmitido el amor por las artes.  Adoro la transcendencia cultural de la cerámica, gracias a ella he tenido la suerte acercarme a otras culturas, a formas de vivir que en un tiempo me fueron ajenas por la distancia temporal y geográfica.
Estoy agradecido  por la cantidad de buenos momentos y personas excepcionales que estoy teniendo la suerte de disfrutar y conocer en mi camino.